Esta semana la empezamos con dos cumpleaños. El de Masha y Rubén que ya cumplen cinco años.
Observamos que el aire ocupa lugar, que en las botellas se queda el aire arriba, aún si giras la botella el aire siempre va arriba. Vaciamos un tetrabrick de zumo, después tratamos de sacar todo el aire que está dentro y vemos que se "estruja" y después lo volvemos a llenar de aire. Por último, dibujamos lo experimentado.
A lo largo de la semana, hacemos diferentes actividades: montar un esqueleto (cráneo, columna vertebral, costillas, pelvis, húmero, cubito y radio, fémur, tibia y peroné...), agrupar elementos de tres en tres en la pizarra, degustar frutos del otoño (uva, nueces, cacahuetes...) y descubrir el cuento que nos trae Piruleta "Supermurci" un murciélago que quiere ser un súper héroe pero su ecolocalización, su buen oído, su capacidad para volar no le hacen serlo pues eso no lo diferencia de otros murciélagos...finalmente demuestra que es un héroe por su valentía.
En la tarde de valores también descubrimos la importancia de la paciencia. La araña la precisa para poder comer su telaraña, la cual hace una y otra vez, las hormigas almacenan comida dedicando horas de recorrido ordenado sin perder la paciencia y el caracol espera pacientemente dentro de su caparazón hasta que hay humedad en el ambiente. Nosotros descubrimos que trabajar pacientemente nos permite trabajar mejor. Practicamos recortando despegando y pegando los papelitos, esperando a que nuestros compañeros nos pasen el pegamento, aunque eso suponga empezar a jugar más tarde. Lo hacen fenomenal.
En lógico-matemáticas, además de series, agrupamientos estamos trabajando el concepto uno más. Uno más es el número siguiente de la secuencia, este truco nos permite sumar uno a casi cualquier número y obtener una respuesta correcta. Además, presentamos las regletas y el valor de cada una de ellas.
Psicomotricidad. Es vital mover el cuerpo, coordinarlo y aprender nuevas habilidades.
Bailamos al ritmo de la música y paramos cuando esta cesa para hacer una estatua. Este juego es muy sencillo y les permite ser conscientes del control de su propio cuerpo.
Los aros. El uso libre les permite reconocer sus propiedades. También jugamos al juego de las sillas pero con aros.
Lanzar un aro no es tan evidente, hacemos carreras de aros, para reforzar dicha habilidad.
Después, nos desplazamos a diferentes ritmos. Saltos con los pies juntos primero despacio y después más rápido. Al ritmo de las palmadas.
Por último, hacemos un salto de león a través de un gran aro y buscamos un lugar para descansar.
El viernes, terminamos el día y la semana modelando plastilina de modo libre.
En inglés descubren que con el rojo y el amarillo sacan el naranja y nosotros descubrimos cómo hacer distintas modalidades de naranja mezclando con blanco y negro y usando el pincel. Además, pintamos con las manos un papel en amarillo. Pues otro día haremos hojas del otoño con estos papeles pintados.
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